El índice de precios al consumidor correspondiente a junio se conocerá este lunes. Las consultoras privadas anticipan una leve aceleración respecto a mayo, con impacto en tarifas, alimentos y servicios.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundirá este lunes el dato oficial de inflación de junio, y las expectativas privadas ya anticipan un leve repunte: la mayoría de las consultoras estima un incremento del orden del 2% mensual, impulsado principalmente por aumentos en precios regulados, servicios públicos, alimentos y el impacto de la devaluación del tipo de cambio durante mayo.
De confirmarse estos cálculos, se trataría de una suba moderada en comparación con abril (2,8%) y un rebote respecto al 1,5% de mayo, el registro más bajo en cinco años. Además, con este nuevo dato se conocerá la inflación acumulada del primer semestre, un dato clave para ajustar escalas del Monotributo y el Impuesto a las Ganancias.
Lo que proyectan las consultoras
Según C&T Asesores Económicos, la inflación de junio fue del 2% para el GBA, con una interanual del 38,7%, la más baja desde 2021. Los alimentos y bebidas subieron un 1,4%, destacándose los incrementos en panificados, lácteos y bebidas.
Libertad y Progreso también estimó un 2% mensual, con una inflación acumulada del 15,5% en el semestre y un alza interanual del 39,9%. Según su relevamiento, los aumentos se concentraron en la primera semana del mes, principalmente por el ajuste en tarifas y educación.
Por su parte, Orlando Ferreres & Asociados proyectó una inflación de 1,9%, con una núcleo en 2,1%, y resaltó subas en educación, bienes varios, alimentos y transporte. En tanto, Analytica calculó una suba del 1,7%, con un promedio de 1,8% en alimentos.
La consultora Equilibra también anticipó una suba del 2% tanto en el IPC general como en el núcleo. Señaló que los precios regulados fueron los que más subieron (+3,2%) y los estacionales aumentaron menos del 1%.
Primeras señales de julio
Las primeras estimaciones de julio muestran un comportamiento similar. PxQ y Analytica esperan una inflación en torno al 2%, aunque con presión adicional por la estacionalidad de las vacaciones de invierno, el pago del aguinaldo y subas en alquileres, combustibles, servicios y transporte.
En cambio, Aldo Abram, de la Fundación Libertad y Progreso, proyectó una desaceleración leve: “Estimamos que julio se ubicará levemente por debajo de junio, cerca del 1,7%, algo poco habitual para este mes”.
Finalmente, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central arrojó un pronóstico de 1,8% para junio, y espera estabilidad relativa para los próximos meses, con valores cercanos al 1,7% mensual hasta diciembre, cerrando 2025 con una inflación proyectada del 27% anual.
SFA – Infobae